3. Baila el Chiki-Chiki (El Chikilicuatre)
Año 2008. Lo que empezó como una broma en el programa de Buenafuente llegó a Belgrado e hizo gracia al público general. España consiguió su mejor puesto en cuatro años y demostró que, en Eurovisión, es mejor tener carisma y una idea creativa que una gran voz o una balada tremendista.
Sin embargo, para muchos fue un chiste y una manera de avergonzar a los fans españoles del festival, puesto que David Fernández (el Chikilicuatre), nunca se tomó la competición en serio. Cosa que, por otra parte, le hizo convertirse en todo un fenómeno social y musical.
Además, hay que destacar que el Chiki-chiki hizo que millones de personas recuperasen el intéres por el festival y que la cadena registrase un gran dato de audiencia en nuestro país (solo superado por Rosa López).