Esta chica y su pareja han sufrido el timo del siglo por parte de un cerrajero en la ciudad de Barcelona. Como cualquier persona humana, tuvo un despiste y se dejó las llaves por dentro de la casa en un domingo por la tarde.
No pudieron abrir y llamaron a un cerrajero de la ciudad Condal y acudió a su 'rescate'. Ahí empezó la odisea. Llegó en 20 minutos, todo simpático, le dijeron que pasó, dijo que era muy sencillo. Tardó unos 10 minutos en abrirla. Les dijo que habría un plus por el festivo, el festivo en cuestión era ser domingo.
El cerrajero cogió un papel parecido a una radiografía, lo pasó por la ranura y la abrió en cinco minutos. La broma del cerrajero les cobró 532,40 por 10 minutos de trabajo. El papelito que pasó fue con un coste de 175€. Y acudir el domingo por el módico precio de 190€.