La asociación Abogados Cristianos no ha tardado en mostrar su profundo desacuerdo con este contenido. Expertos en marketing explican que el público objetivo de la marca no es la población infantil, sino los jóvenes y, sobre todo, la generación Z.
Si escuchas "Leche, cacao, avellana y azúcar", inmediatamente te vendrá a la mente una marca: Nocilla. Desde este mítico anuncio de los años ochenta, Nocilla ha sido una de las marcas españolas que más ha destacado en cuanto al marketing se refiere. Sus anuncios siempre han sabido calar entre su público objetivo, logrando que se clavaran en sus retinas y memorias.
Y esto ha vuelto a ocurrir. Aunque esta vez levantando cierta polémica. Dentro de su última campaña, "Díselo con Nocilla", la marca ha lanzado un anuncio en el que aparece un hombre mayor con un Satisfyer en la mano, colocándoselo en la frente para tratar de tomarse la temperatura, confundiéndolo con un termómetro.
Sentada en la misma mesa, aparece una adolescente, supuestamente la nieta del anciano que, con cara de circunstancia, mira a la cámara mientras su voz en off dice: "Cuando le digas a tu abuelo que eso no es un termómetro, díselo con Nocilla".
El anuncio ha desatado una ola de críticas y opiniones encontradas. La asociación Abogados Cristianos ha manifestado su desacuerdo con el contenido, considerándolo inapropiado y ofensivo. Sin embargo, los expertos en marketing defienden la estrategia de la marca, explicando que el objetivo de Nocilla no es atraer a la población infantil, sino a los jóvenes y, en particular, a la generación Z, conocida por su sentido del humor y apertura a temas tabú.
Nocilla, con su habilidad para adaptarse a los tiempos y conectar con su audiencia, ha demostrado una vez más su capacidad para generar conversación y mantener su relevancia en el competitivo mundo del marketing.